A lo largo de nuestra vida, pasamos por situaciones difíciles y ante ellas no sabemos qué camino tomar o qué herramientas utilizar o qué consejo seguir para salir de las mismas. Nos tocan problemas laborales, o quizá problemas de salud sean nuestros o de alguien cercano; también puede suceder que perdamos nuestro trabajo y con ello la seguridad que nos proporcionaba para seguir adelante, o afrontamos la pérdida de la pareja, o pérdida de un familiar. Todas estas problemáticas nos hacen perder la confianza, nos bloquean y nos impiden vivir tranquilamente.
Desde CREER EN TI, las diferentes problemáticas que combatimos para ofrecer confianza y bienestar son:
La depresión menor o Distimia, se caracteriza por un estado de ánimo depresivo leve, variable, pero que permanece durante un largo período de tiempo.
Es un trastorno muy común que pasamos por alto. Los cambios que se producen en nuestra vida van transformando nuestro estado de ánimo en incapacidad para alcanzar lo que deseamos; nuestro ánimo va decayendo y no conseguimos mejoría, en la mayoría de los casos, va asociado a problemas de ansiedad.
La sintomatología de la depresión menor o Distimia es:
– Estado de ánimo deprimido o desánimo, unido a falta de interés por todo lo que nos rodea.
– Este trastorno está relacionado con una autoimagen negativa, donde el individuo se percibe como persona poco interesante, y con ello se llega a una baja autoestima.
Por todo esto, el sufrimiento físico y psicológico va deteriorando nuestra percepción del mundo en el que vivimos.
Estos síntomas dificultan nuestra vida tanto a nivel laboral, doméstico, y social. Consecuencia de ello, el rendimiento en cada una de las tareas que se asumen es bajo.
Cada día que se vive, se traduce en una permanente falta de energía, un cansancio continuo y no hay motivación para hacer aquello que antes llenaba.
La capacidad de tomar decisiones merma, y no se sabe dar salida a problemas que antes se afrontaban.
En la terapia, se busca el origen y los factores que mantienen la Distimia. A través de la intervención con la persona que acude a terapia, se logra que volver al equilibrio emocional que faltaba.
Hoy en día, la Depresión Postparto, es una expresión que se escucha mucho.
Los principales síntomas que pueden aparecer son:
– Cambios de estado de ánimo.
– Ansiedad.
– Agobios.
– Pérdida de apetito.
– Dificultad para dormir.
– Desinterés por el recién nacido.
La depresión postparto puede desarrollarse en cualquier momento dentro del primer año después de dar a luz. Aunque la causa se desconoce, se considera que los cambios hormonales y físicos juegan un papel muy importante.
En CREER EN TI ponemos a disposición a nuestros profesionales de Bilbao, especializados en tratar la depresión postparto. Se recibe atención personalizada y seguimiento continuo.
Para más información, ponte en contacto con nosotros. En CREER EN TI queremos y podemos ayudarte.
La Autoestima es un conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencias de comportamiento dirigidas hacia nosotros mismos, hacia nuestra manera de ser y de comportarnos, y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y nuestro carácter. En resumen, es la percepción evaluativa de nosotros mismos.
La importancia de la autoestima estriba en que concierne a nuestro ser, a nuestra manera de ser y al sentido de nuestra valía personal. Por lo tanto, puede afectar a nuestra manera de estar y actuar en el mundo y de relacionarnos con los demás. Nada en nuestra manera de pensar, de sentir, de decidir y de actuar, escapa a la influencia de la autoestima.
El Coaching es un método de instrucción, entrenamiento y acompañamiento dirigida a una persona o a un grupo de ellas, con el objetivo de conseguir alguna meta o desarrollar habilidades específicas.
Hay muchos métodos y tipos de coaching, y entre sus técnicas se puede incluir charlas motivacionales, seminarios, talleres y prácticas supervisadas.
Contacta con CREER EN TI; juntos lograremos objetivos, alcanzaremos metas o desarrollaremos habilidades.
Los niños, en su evolución, pasan por distintas etapas que debido a circunstancias particulares impiden en muchos casos una evolución adecuada. Conviene estar atentos al comportamiento del niño y valorar las consecuencias de los actos en él mismo, en el ambiente familiar y escolar, o en su forma de relacionarse con los amigos y demás compañeros.
Ante comportamientos como: miedo, desafío, timidez, baja autoestima, desobediencia, tristeza, agresiones físicas y verbales y ansiedad, se activa una alarma y debemos actuar para encontrar la raíz del problema que hace que su comportamiento no sea el adecuado. Lo más pronto que se haga la intervención, será más fácil la evolución a las siguientes etapas de formación.
La adolescencia es una etapa en la que se producen en el individuo importantes cambios tanto físicos como psicológicos. Se trata de un periodo difícil en el que se pasa de la infancia a la vida adulta.
En muchas ocasiones los múltiples cambios que se producen en esta etapa no son fáciles de asimilar por el adolescente y son típicas las actitudes como el aislamiento de la familia, la introversión e incluso la irascibilidad. Se trata de un periodo clave en el que se está conformando la personalidad del nuevo adulto.
Es muy frecuente que los padres se sientan desorientados y no sepan cómo actuar ante las nuevas conductas y actitudes del adolescente.
¿Te gustaría disfrutar de una terapia más accesible y discreta?
En CREER EN TI encontrarás la modalidad de psicología online. Este servicio proporciona muchos beneficios, ya que es igual de efectivo que la terapia presencial, es más inmediato y además tiene un coste más bajo.
La terapia online sigue la misma metodología que la terapia tradicional, pero a través de los medios de internet, proporcionando a nuestros pacientes una mayor comodidad y discreción en cada una de las sesiones.
Disfruta de la misma calidad de las sesiones terapéuticas pero sin moverte de tu casa. Con CREER EN TI te sentirás más cómodo. Si necesitas más información, no dudes en ponerte en contacto en el 646 968 351, o bien rellenando el formulario de contacto.
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La Terapia Cognitivo Conductual es una terapia enfocada en la vinculación del pensamiento y la conducta. Recoge diferentes aportaciones de las distintas áreas de la psicología científica, convirtiéndola en una fusión de la psicología cognitiva y la psicología conductista.
A través de la Terapia Cognitivo Conductual se combinan técnicas de reestructuración cognitiva, estrategias de afrontamiento, de exposición y de relajación.
Se afirma que el 100% de nuestra forma de ser y de pensar está asociada a las experiencias de vida que hemos tenido, y esta terapia se encarga de buscar la relación entre lo cognitivo y lo conductual.
En CREER EN TI contamos con los mejores psicólogos especialistas en Terapia Cognitivo Conductual de Bilbao, asegurándote los resultados y objetivos que nos propongamos.
El principal objetivo de CREER EN TI es ayudarte a sentirte bien para que disfrutes de la vida en todos los aspectos. Si necesitas más información, no dudes en ponerte en contacto con nosotros llamando al 646 968 351, y te atenderemos de inmediato.
Muchas parejas pasan por momentos difíciles que pueden acabar rompiendo la relación. Los motivos que llevan a una pareja al conflicto son muy diversos y complejos.
En ocasiones existe un claro detonante, como una infidelidad o celos y en otras se trata de un deterioro en la relación que no consiguen entender los propios miembros de la pareja.
La terapia marital es lo mejor que las parejas con problemas en la relación pueden hacer para salvar su matrimonio.
En CREER EN TI ofrecemos apoyo e intervenimos para explicar las causas que han llevado a la pareja a la situación actual, detectamos los patrones destructivos que se han establecido y proponemos pautas, ejercicios y negociaciones para llegar a una solución de los problemas y romper las barreras que bloquean la relación.
En CREER EN TI queremos ayudarte.
La Terapia Grupal es un tipo de tratamiento terapéutico en el que se tratan los problemas y trastornos emocionales de un individuo, pero involucrando a más personas que de igual modo cuentan con otro tipo de problemas que les impiden llevar una vida más plena.
Entre los grupos se encuentran:
– Grupos duelo por enfermedad oncológica.
– Duelo en personas mayores que han quedado viudos/as,
– Duelos por muerte traumática,
– Personas que han sufrido cualquier tipo de violencia.
– Habilidades sociales, inteligencia emocional.
– Grupos de padres que tienen hijos con discapacidad. Un espacio para los cuidadores.
– Grupos para familiares de personas mayores con enfermedad neurodegenerativa.
¡Llama ahora y pide tu cita con un especialista!
En CREER EN TI encontrarás la terapia para adolescentes enfocada a atender y resolver los problemas, los traumas o las frustraciones que puede presentar un joven en la etapa de la adolescencia, de la cual es bien sabido que tiene cambios emocionales y físicos bastante complicados.
El objetivo de la terapia para adolescentes es que los jóvenes restablezcan y recuperen su bienestar en poco tiempo, para que su crecimiento e interacción social no se vean afectados.
Si notas que tu hijo está pasando por un mal momento y su actitud y conducta no son las adecuadas, ponte en contacto, aquí encontrarás a un especialista dispuesto a ayudarte.
Llama hoy al 646 968 351 y pide información sobre la Terapia para Adolescentes.
En un porcentaje elevado de casos con crisis de pánico se desarrolla una sintomatología propia de la agorafobia, que se caracteriza por un miedo intenso a estar solo fuera de casa, mezclarse con la gente o ir a lugares concurridos, pasar por un puente, viajar en tren, metro o autobús, o ir al cine, o evitar reuniones sociales por miedo a quedar en ridículo en el caso de tener una crisis de angustia.
Es muy típico que los pacientes agorafóbicos oculten a los demás sus temores y adapten su vida a lo que la agorafobia les permite hacer. En muchas ocasiones ponen excusas a los demás para evitar las situaciones que les angustian, lo que puede llegar a limitar la vida y la autonomía para salir fuera de casa hasta el extremo.
La agorafobia también pude darse en personas que nunca han padecido con anterioridad una crisis de pánico.
Si sientes ansiedad y no sabes cómo controlarla, en CREER EN TI encontrarás la solución. Existen varios motivos por los que puedes sufrir ansiedad:
– Ritmo de vida rápido
– Problemas en el trabajo, familia, amigos, etc.
Es recomendable saber controlar las situaciones de ansiedad para que no se conviertan en un problema de salud, y en CREER EN TI encontrarás la ayuda que necesitas.
Si quieres ponerte en contacto, no dudes en llamar al 646 968 351.
La Fobia Social se caracteriza por la aparición intensa de ansiedad junto con una consciencia exagerada de uno mismo en situaciones sociales de la vida cotidiana. Las personas con fobia social tienen miedo intenso, persistente, y crónico de ser observadas y juzgadas por los demás y de hacer cosas que puedan parecer ridículas. Se pueden sentir preocupadas durante días o semanas ante una situación que les produce temor. Este miedo puede tornarse tan intenso, que interfiere con el trabajo, los estudios, y demás actividades comunes, y puede dificultar el hacer nuevas amistades o mantenerlas.
Aunque las personas con fobia social son conscientes de que los miedos de estar con la gente son excesivos o irracionales, son incapaces de superarlos. Incluso en el caso de que logren enfrentar sus temores y logren estar rodeadas de otras personas, con frecuencia se sienten muy ansiosas de antemano, se sienten muy incómodas durante el encuentro, y se preocupan durante muchas horas después de la situación acerca de cómo fueron juzgadas por los demás. La fobia social se puede limitar a una sola situación tal como preguntar algo a la gente, comer o beber, o escribir en una pizarra en frente a los demás, o puede ser tan amplia como en el caso de una fobia social generalizada. Los síntomas físicos que acompañan con frecuencia a la fobia social incluyen enrojecimiento del rostro, transpiración intensa, temblor, náuseas, y dificultad para hablar.
Los pensamientos de las personas con fobia social cuando se encuentran con otras personas suelen ser: “No tengo nada interesante que decir”, “No les caeré bien”, “Pensarán que soy aburrido”, “Ahora mismo soy el único que se siente apurado”, “Si alguien supiera cómo me siento pensaría que soy un pringado”, “Todo el mundo se da cuenta de lo nervioso que estoy”, “Estoy haciendo el ridículo”, “Los demás son superiores a mí”, “Soy el único que no sabe qué decir”…
A pesar de que la fobia social en sus formas más graves puede llegar a ser altamente limitante, es un trastorno que puede ser tratado con éxito.
La respuesta de estrés es fruto de una activación fisiológica de nuestro organismo, automática e involuntaria, que se produce ante situaciones en las que existe una percepción de peligro para el individuo o por una demanda importante.
Esta respuesta produce en nuestro organismo unos cambios fisiológicos que nos preparan para hacer frente al peligro o a la demanda a la que nos debemos enfrentar, entre los que destacan un aumento de la presión arterial, aumento de la frecuencia cardíaca, aumento de la tensión en los músculos, aumento del riego sanguíneo al cerebro, aumento de la secreción de adrenalina, disminución del riego sanguíneo a la piel y al sistema gastrointestinal, entre otros.
La respuesta de nuestro organismo está diseñada para que nuestro cuerpo disponga de energía para hacer frente al peligro y por tanto no es problemática en sí misma. El problema surge cuando esta repuesta de estrés se da con mucha frecuencia o durante tiempo prolongado. Es entonces cuando aparecen las consecuencias negativas del estrés.
El problema de la persona estresada es que percibe muchas demandas a las que ha de enfrentarse y por tanto activa su organismo con mucha frecuencia, forzándolo en exceso y por lo tanto produciendo síntomas físicos y psicológicos.
Entre los síntomas más típicos encontramos los dolores de cabeza y espalda, malas digestiones, taquicardias, dificultades de concentración y olvidos frecuentes, mareos, insomnio, nerviosismo y preocupaciones, irritabilidad, ansiedad.
Sin embargo, el estrés puede generar multitud se síntomas y alteraciones en nuestro organismo y a largo plazo el desgaste producido por la activación repetida de nuestro cuerpo puede generar enfermedades graves.
La ansiedad en sí misma es una emoción normal que todos podemos sentir en algún momento. El problema se produce cuando esta ansiedad es demasiado intensa, demasiado frecuente o perdura demasiado en el tiempo y llega a interferir en el desarrollo normal de nuestra vida o incluso a limitarla gravemente. Entonces es cuando dejamos de hablar de una emoción normal para empezar a hablar de un trastorno de ansiedad.
Existen diferentes trastornos de ansiedad. Quizás el más destacable es el trastorno de pánico que se caracteriza por la presencia intensa y repetida de un miedo muy intenso que suele acompañarse de síntomas como palpitaciones y taquicardias, sensación de ahogo o falta de aire, sudoración, temblores y sacudidas, sensación de atragantarse, opresión o malestar torácico, nauseas o molestias abdominales, inestabilidad o mareo, sensación de irrealidad, miedo a perder el control o a volverse loco, miedo a morir (generalmente de un infarto o de un derrame cerebral), parestesias (adormecimiento u hormigueo de diferentes partes del cuerpo) y escalofríos o sofocaciones. Sabemos por nuestros pacientes que, vivir una crisis de pánico es una experiencia muy negativa, especialmente si es la primera.
Sabemos también que tras la primera crisis suele surgir mucho miedo a experimentar nuevas crisis de pánico lo que lleva a observar mucho el organismo y evitar la realización de deportes u otras actividades que supongan acelerar en alguna medida sus funciones.
Es fundamental en este trastorno, y así lo hacemos con nuestros pacientes, asegurar que nada malo puede suceder a consecuencia de una crisis de pánico puesto que nuestro organismo está perfectamente preparado para generar crisis de pánico sin que le suceda nada malo, por ejemplo ante un león o ante un atracador. Sin embargo, entendemos que este argumento no es suficiente para eliminar el miedo a una nueva crisis antes de comenzar una terapia.